La pandemia por la Covid-19 ha traído una doble crisis sanitaria y económica, en ambos casos de magnitudes históricas. Un rebrote generalizado ahora, tras la desescalada, sería fatal en todo sentido. La economía ha sufrido más que en el 2008 y la perspectiva por una nueva marcha atrás es muy desalentadora. El golpe de un rebrote será más duro principalmente para aquellos que cuentan con menos respaldo: la economía de autónomos y pymes.
Las organizaciones de autónomos encienden la alerta porque muchas de las actividades que, con esfuerzo, habían logrado sobrevivir a la pandemia, no soportarían un rebrote. Cerrar la persiana o achicarse dos veces en el año es casi imposible de aguantar para la mayoría de los autónomos.
La temporada de verano podía ser un salvavidas pero el turismo, clave en la economía española, es una de las áreas más afectadas por la situación actual. Un rebrote acabaría por aniquilar a toda la estructura productiva de pymes alrededor del turismo que había recuperado algo de esperanza en las últimas semanas. Pero en el horizonte tan solo hay incertidumbre. Además, hay que tener en cuenta que el año pasado la situación no era de lujo. Y ahora han caído el turismo, las exportaciones, el comercio y la inversión extranjera. En España, la cadena de deudas desde los más chicos hasta el nivel estatal es cada vez mayor.
Autónomos exigen medidas por rebrote
El Sindicato de Autónomos de España (SAE19) exige medidas gubernamentales para paliar los efectos económicos en los autónomos. Y piden que, junto con las restricciones que se apliquen por rebrotes, se implementen también estrategias para costear las pérdidas de autónomos y pymes.
Muchas pymes habían apostado a la «nueva normalidad» adaptando sus establecimientos con nuevos sistemas de producción y atención al cliente. Esto ha conllevado un gasto considerable en materiales, sistemas y entornos de trabajo. Ahora, un rebrote resulta una amenaza real de cierre para la economía de autónomos y pymes con menor facturación
El Sindicato ha advertido sobre la necesidad de ayudas proporcionales al nivel de las pérdidas que se siguen sufriendo. Urge un plan estratégico de rescate para la base económica del país que no es ni más ni menos que el colectivo de los autónomos. Las medidas restrictivas ante posibles rebrotes deben ir «acompañadas con una serie de ayudas adecuadas al impacto que puede afectar a los autónomos y empresarios», ha dicho el presidente de SAE19, David Álvarez de la Riva. En estas circunstancias, es responsabilidad de los gobiernos impedir la pérdida de negocios. Desde el Sindicato sugieren que la consigna «Cero ingresos, cero gastos» es la única manera de salvaguardar a los tres millones de autónomos que todavía siguen en pie.
Mientras tanto, las pymes se aferran a los ERTEs que continúan vigentes hasta el 30 de septiembre. Así, consiguen al menos beneficios indirectos a través de las exenciones de las cotizaciones sociales. Otros autónomos que estaban cerca de jubilarse van a optar por esta decisión ante la opción de seguir manteniendo un negocio en plena incertidumbre.
Periodismo y redacción creativa. Estudié Cs. de la Comunicación en la Universidad de Buenos Aires.
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