Un deportista que ha sido un ejemplo a seguir y que ha alcanzado la gloria internacional en su especialidad, acumulando una fortuna millonaria.
Rafael Nadal o mejor conocido como Rafa Nadal, nació el 3 de junio de 1986 en la localidad Mallorquina de Manacor, España. Es hijo de Ana María Parera y del empresario Sebastián Nadal, director de una empresa que construye pistas de pádel y que a su vez organiza eventos deportivos.
Un chico normal, motivado por su tío Antonio Nadal Homar, entrenador y preparador físico de tenis español, quien lo encamino por el sendero del tenis, hasta convertirse en su entrenador y representante.
Un joven talentoso
Desde muy pequeño practicaba varias horas al día con su tío Antonio, y así fue descubriendo el gran potencial que tenía para el deporte. Cada vez se sentía más entusiasmado por el balompié, pero dentro de su práctica entre el fútbol y el tenis habían descubierto que se le daba mejor la raqueta, así fue que su tío lo convenció de dedicarse exclusivamente al tenis.
No en vano se le proclamó campeón infantil de España a los once años. A sus quince años como un joven profesional había logrado conseguir una fortuna millonaria. Realmente era una era una gran promesa en el deporte. Así que no más tardar a sus veintidós años logró convertirse en el número 1 del mundo.
Pero no todo en esta vida son victorias, a lo largo de su vida se ha visto frustrado por una infinidad de lesiones.
«No hay ningún secreto para esto. No puedo decir que he tenido suerte con el tema de las lesiones, porque no ha sido así. La clave de este éxito es la pasión por este deporte y el ser positivo cuando peor van las cosas. Es cierto que he pasado por momentos muy complicados a lo largo de mi carrera profesional, pero con la actitud positiva y rodeado de las personas adecuadas, todo se hace más ameno y fácil de superar. Mucha gente pensaba que mi carrera sería corta debido al estilo de juego que tenía, pero aquí seguimos batallando. Estoy muy feliz de estar donde estoy y con la edad que tengo. Espero seguir disfrutando con esta condición».
Rafael Nadal
Carlos Gámez – Fuente: 20minutos.es
«Si tengo momentos bajos es por tener más dolor de la cuenta. Por ejemplo, cuando me duele la mano, la rodilla, la operación del pie… Son muchas cosas que te inhabilitan, y ya no sólo en tu vida profesional, también en la personal. Me impide hacer cosas que me hacen feliz. Pero cuando me recupero, me da esa fuerza. Sé que no voy a estar para siempre y el tiempo que siga jugando lo quiero jugar con esta pasión»
Rafael Nadal
Las lesiones han formado parte de su carrera, pero no le han impedido ser considerado como uno de los mejores tenistas de la historia.
De deportista a empresario, la otra faceta de Nadal
Durante los meses que Nadal tuvo que alejarse de las pistas por sus lesiones, aprovechó para fortalecer su vertiente empresarial e invertir sus ganancias.
Su popularidad y su carisma ha sido elevada hasta límites insospechados. Infinidad de marcas lo han buscado como imagen. Inclusive Nike, la firma que le patrocinaba, estaba dispuesta a entregarle un cheque en blanco para mejorar el contrato que tenía desde los dieciséis años para convertirlo en el icono de la multinacional en el ámbito tenístico. Siendo esta la primera vez que un tenista ocupaba esa privilegiada posición de popularidad en España. Realmente logro volverse un ídolo.
Un año más, Rafa encabeza la lista como el deportista español mejor pagado, al menos en cuanto a salario el tenista se embolsó en 2020, según un informe de la revista Forbes, la suma de 40 millones de dólares. De esos 40 millones, 26 vinieron de ingresos por torneos y los 14 restantes de la publicidad.
El patrimonio que ha ido forjando de esos contratos millonarios y los demás logros de su carrera, lo ha reunido en un conglomerado empresarial que tiene tres pilares fundamentales: los negocios hoteleros e inmobiliarios, su fundación dedicada a ayudar a los niños y jóvenes en riesgo de exclusión social con el objetivo de fomentar la inclusión social a través de la educación y el deporte, proporcionándoles herramientas para desarrollarse en todos los ámbitos de su vida, y por encima de todo la marca Rafa Nadal. La que atrae a las principales empresas del mundo hacia el éxito.
Realmente él es un gran ejemplo de que a pesar de las adversidades que se le presentaron; las excusas nunca lo hubieran hecho ganar un partido. Aun cuando seas un chico/a normal la perseverancia, el esfuerzo, el sacrificio, la disciplina, que pongas en lo que realmente te apasiona recuerda que eso será el camino al éxito.
Nunca ha sido fácil emprender un nuevo camino pero siempre recuerda por qué iniciaste.
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