Son los sectores más importantes de la economía en Barcelona. Y también son los más afectados por la crisis de la Covid-19. Además, hoteles y restaurantes consideran que el trato por la Generalitat no ha sido el mejor. Y señalan la incoherencia de las medidas: la apertura de locales, aun con restricciones, se contradice con la recomendación de quedarse en los hogares.
¿Es realmente el sector del ocio nocturno el origen de los rebrotes? No puede comprobarse pero así se está instalando en el inconsciente colectivo. La Federación Catalana de Locales de Ocio Nocturno (Fecalon) cree que su sector está estigmatizado. Esto perjudica la recuperación de la actividad de los principales sectores económicos barceloneses. Los vaivenes de la pandemia condicionan la supervivencia de los negocios en un contexto de futuro incierto.
Los referentes gastronómicos y hosteleros de Barcelona consideran que hace falta aumentar los controles y ofrecer mayores medidas de prevención, dentro de una estrategia general que contenga a la población. La ciudadanía, por su parte, debe ser consciente de la importancia de la responsabilidad colectiva: es una cadena de compromisos en todas las áreas.
Con las nuevas medidas, tanto los hoteles como los restaurantes han quedado en un escenario desfavorable. A la posibilidad de la reapertura se le contrapuso un conjunto de restricciones que llevó a la cancelación casi automática de numerosas reservas. Es probable que vuelvan a cerrar varios de los establecimientos que habían abierto por la desescalada.
Es crítica la situación del sector en Barcelona. El turismo no se activa y seguirá así por un buen tiempo. Y los que viven en la ciudad se están marchando. Según datos del Servei Català del Trànsit, el 36% de los más de 400.000 vehículos que salieron de Barcelona durante el fin de semana, aún no ha regresado. Todo esto, a pesar de las restricciones de movilidad.
Periodismo y redacción creativa. Estudié Cs. de la Comunicación en la Universidad de Buenos Aires.